El Congreso rechazó con 49 votos la propuesta de consulta popular que había sido radicada por el Gobierno, pero se retomaría la discusión de la reforma laboral original que había sido archivada.
Sin embargo, la reforma laboral revivió gracias a una apelación que tuvo 68 votos a favor y solo tres en contra. La democracia habló en el Senado y votó no a una consulta popular inconveniente que les iba a quitar a los colombianos $750.000 mil millones de su bolsillo, dijo el presidente del Senado, Efraín Cepeda.
Luego el congresita, a través de su red X anunció que la discusión de la reforma laboral «sigue viva porque consideramos que es necesaria, una reforma para mejorar el empleo de los colombianos y la informalidad, pero declaro la no conveniencia de una consulta popular que servía únicamente para fines políticos y politiqueros, y que pretendía,gastarse casi un billón de pesos del bolsillo de ustedes, de todos nosotros los colombianos.
«El uribismo hundió la reforma laboral en la comisión séptima, y como la revivimos como consulta, ahora hunde la consulta, para revivir la misma reforma laboral que hundió en la comisión séptima. Todo un desastre de partido», publicó el presidente Gustavo Petro en redes.