Argentina se destaca por tener suelos realmente muy ricos, con una relación entre nutrientes y clima que habilitan a distintos productores a desarrollar sus tareas de forma muy favorable, aunque como en toda esta actividad, con riesgos. Dicho país supo ser el granero del mundo, alimentando a todo el globo con sus materias primas, pero ciertas políticas y limitaciones en la producción agrícola, genero como consecuencia un estancamiento en la producción campaña tras campaña y un traslado, en el caso de la soja, de exportación netamente de poroto a industrialización (harina y aceite).
A la hora de analizar el comercio internacional del complejo sojero, vemos como principales actores a Argentina, Brasil y Estados Unidos. En el caso de Argentina, su industrialización se destaca a nivel mundial por ser el principal exportador de subproductos de la soja. Por otro lado, tanto Brasil como Estados Unidos se caracterizan por ser principalmente exportadores de poroto de soja.
A continuacion observaremos por pais, la estructura y matriz del complejo sojero.
Argentina
Observamos para la producción de soja argentina viene creciendo desde la campaña 2017/18 pero que luego de la campaña 2018/19 comenzó a ceder y a disminuir su volumen (problemas climáticos, decisiones políticas que no alientan a los productores a aumentar su siembra, altos costos, etc.).
Por otro lado, la producción de los subproductos es encabezada con la harina de soja que mantiene su volumen productivo campaña tras campaña mientras que el aceite de soja, con un volumen mucho menor también transita cierta regularidad en su producción.
Ahora, si analizamos las exportaciones argentinas, vamos a conocer que es un país netamente exportador de subproductos. La harina de soja se exporta casi el 90% de lo producido y el aceite de soja cerca del 95%. En cambio, el poroto de soja se exporta solo alrededor del 10% de lo producido.
BRASIL
Brasil viene rompiendo récords productivos campaña tras campaña. A partir del año 2019 le quito el puesto de principal productor mundial de soja, nada más y nada menos, que a los Estados Unidos. Sin dudas que nueva genética, junto con buenas decisiones políticas y una importante expansión agrícola, dieron como resultado una superproducción de la oleaginosa en el gigante sudamericano. En cuanto a los subproductos, mantienen una producción regular año tras año, con un volumen mucho menor pero también con un importante uso en su mercado interno.
En cuanto a las exportaciones, tiene una matriz totalmente distinta que Argentina, con un mercado netamente exportador de poroto de soja y una industrialización menor. Esto principalmente se debe a que en Brasil no se le aplica impuestos a la exportación de poroto de soja, siendo un libre mercado y embarcando automáticamente la soja cosechada. En este caso, casi el 70% de la producción de soja brasilera, es con destino exportador. Luego le sigue la harina de soja, exportando cerca de 20 millones de toneladas y finalmente, el aceite con exportaciones por 1 o 2 millones de toneladas.
ESTADOS UNIDOS
Estados Unidos también venia mostrando un crecimiento productivo campaña tras campaña a través de nuevas tecnologías, pero no logro que ese aumento sea mas significativo, principalmente por una disminución en el área a sembrar que se vio afectada por la elección del maíz por parte de los farmers norteamericanos (esto se debió a los muy buenos precios internacionales). Pero en la campaña que se esta transitando, hubo un cambio sobre este tópico ya que los altos precios de fertilizantes nitrogenados, han inclinado a los productores hacia la soja, aumentando así su área a sembrar significativamente mayor a la de maíz. En relación a los subproductos, sus producciones muestran cierta regularidad año tras año, aunque por el lado del aceite de soja se espera un aumento en su producción por los altos precios del petróleo y el mercado energético en general.
La matriz exportadora de Estados Unidos es muy similar a la de Brasil, siendo el poroto de soja el principal activo del complejo con destino exportador, y los subproductos en una medida mucho menor. Vemos como casi el 50% de la producción de poroto de soja se exporta, mientras que la harina toma el segundo lugar con alrededor de 13 millones de toneladas por campaña.
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