La producción brasileña de soja en 2025/26 debería totalizar 178,76 millones de toneladas, con un aumento del 4% respecto a la cosecha de la temporada anterior, que fue de 171,84 millones de toneladas. La estimación es de Safras & Mercado. El 5 de septiembre, fecha del cálculo anterior, la proyección era de 180,92 millones de toneladas.
Safras indica un incremento del 1,4% en el área sembrada, estimada en 48,31 millones de hectáreas. En 2024/25, el cultivo ocupó 47,64 millones de hectáreas. El relevamiento señala que la productividad promedio debería pasar de 3.625 kg/ha a 3.719 kg/ha.
Gran parte de los ajustes ocurre en el Centro-Norte del país (MATOPIBA), debido a lluvias irregulares, retraso en la siembra en comparación con años anteriores y, en promedio, una perspectiva de menor potencial productivo. En conjunto con factores como el resiembra, esto no significa una cosecha perdida, sino solo un potencial menor en algunas regiones de estos estados, explica el analista de Safras, Rafael Silveira.
En Tocantins, el potencial productivo fue reducido de 3.800 kg/ha a 3.660 kg/ha, es decir, de 63,3 sacas a 61 sacas por hectárea, con una producción esperada en torno de 5,7 millones de toneladas. También hubo reducción de productividad en Maranhão, Bahía y otros estados del Norte.
En Paraná, uno de los principales estados productores de soja del país, adversidades climáticas recientes afectaron algunas áreas del cultivo, con heladas y tornados, lo que llevó a ajustes en la producción, cuya expectativa es de aproximadamente 21,7 millones de toneladas una cifra mayor que la de la cosecha pasada, pero aún por debajo del potencial primario anterior.
En general, se espera una cosecha récord en 2026, con buenas productividades y una producción estimada en torno de 178,7 millones de toneladas, frente a los 180,9 millones de la estimación de septiembre. Se trata de un ajuste relativamente pequeño, que mantiene una producción muy robusta, concluye Silveira.






