Los recientes datos de la faena ganadera correspondientes a febrero de Argentina han generado preocupación debido a la notable liquidación de hembras, lo que amenaza la posibilidad de un año de retención de vientres.
Durante febrero, se faenaron un total de 1.039.504 cabezas de ganado, marcando una disminución del 4,2% respecto al año anterior. Aunque esta cifra representa una reducción menor en comparación con años anteriores, sigue siendo significativa, especialmente considerando el elevado nivel de faena registrado en 2023, el cual fue el más alto desde 2009, explicó la analista Iara Parrilla Fronteck de Safras & Mercado.
El inicio del año ha mostrado una cantidad elevada de faena, sugiriendo una perspectiva de retención de ganado para el presente año. Este escenario se desarrolla en uncontexto donde el año anterior no se produjo la cantidad de crías necesarias para mantener el stock ganadero, implicando así una reducción esperada del ganado.
En cuanto a la faena de machos, se observa una disminución del 7% en comparación con el año anterior. Además, la faena de novillos continúa disminuyendo, reflejando la falta de crías para mantener el stock ganadero, con una caída del 16% respecto a enero y un 3,8% en relación con el mismo período del año anterior, explica el reporte.
Esta disminución puede atribuirse en parte al desajuste del tipo de cambio y al hecho de que el novillo argentino sea el más caro dentro del Mercosur, lo que lo vuelve menos atractivo en comparación con nuestros competidores. Sin embargo, en el acumulado, se encuentra por encima de los niveles registrados en 2021 y 2022, debido a que las exportaciones continúan siendo más atractivas en comparación con el mercado local, especialmente en un contexto de descenso en el consumo interno debido a la recesión que atraviesa el país, dijo Fronteck.
Julieta Marino / Agencia CMA Safras