El presidente Javier Milei anunció el inicio de una nueva etapa «reformista» a partir del 11 de diciembre, fecha en que asume el nuevo Congreso.
Según entrevista en A24, el eje de su gestión se centrará en impulsar con determinación dos reformas estructurales ya diseñadas: una simplificación impositiva para reducir la carga fiscal y una modernización laboral que será de carácter opcional, buscando reducir la informalidad y generar más empleo.
Respecto a la gobernabilidad y su equipo, el Presidente adelantó que los cambios de Gabinete estarán directamente vinculados a la próxima composición legislativa, buscando rodearse de «los mejores» sin importar su pertenencia partidaria, y planea reunirse con gobernadores y con el expresidente Mauricio Macri para consolidar acuerdos.
«Esto es la confirmación del rumbo. Ahora vamos recargados por las reformas estructurales. Cuantas más reformas hagamos, mejor será la calidad de vida de los argentinos», indicó.
Sin embargo, Milei fue tajante con el gobernador bonaerense Axel Kicillof, a quien calificó como «parte del problema, no de la solución», debido a su ideología.



