El gobierno nacional anunció una serie de medidas económicas orientadas a reducir la presión fiscal, simplificar el sistema tributario y proteger la privacidad financiera de los ciudadanos.
A partir del 1 de junio dejará de utilizarse a la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) como fuente masiva de información sobre consumos y patrimonio, y se limitará exclusivamente a la facturación. Así, se eliminarán regímenes informativos como el Cruzamiento Informático de Transacciones Importantes (CITI) y los escribanos dejarán de reportar operaciones a este sistema.
También se modifican los montos mínimos para que los bancos informen operaciones como extracciones, transferencias y plazos fijos, elevando significativamente los umbrales, lo que reducirá el control sobre movimientos personales.
En detalle, desde el 1 de junio, las medidas aplican a:
- Monto general de operaciones: Se informarán solo si superan los US$ 50 millones para personas físicas y los US$ 30 millones para personas jurídicas.
- Extracciones bancarias: Se informarán solo si superan los US$ 10.000 para personas físicas y jurídicas.
- Saldos bancarios: Se informarán solo si superan los US$ 50 millones para personas físicas y los US$ 30 millones para personas jurídicas.
- Transferencias: Se reportarán únicamente si superan los US$ 50.000 para personas físicas y US$ 30.000 para personas jurídicas.
- Plazos fijos: Se comunicarán únicamente si superan los US$ 100.000 para personas físicas y US$ 30.000 para personas jurídicas.
- Tendencias en ALyCs (Agentes de Liquidación y Compensación): Solo se informarán si superan los US$ 100.000 para personas físicas y US$ 30.000 para personas jurídicas.
- Compras del consumidor final: Se informarán desde $10 millones para personas físicas y jurídicas.
Ya no se pedirá a los bancos la declaración jurada de impuestos ni se informarán códigos de operaciones como la venta de autos usados o propiedades.
Además, se presentará un nuevo régimen simplificado de Ganancias y un proyecto de ley para brindar estabilidad fiscal futura. De esta forma, se reducirá la carga impositiva sobre ciudadanos y empresas para fomentar la formalización, al tiempo que se reconoce que la alta presión tributaria generó informalidad.
En el plano financiero, se impulsará un nuevo esquema llamado “Finanzas Abiertas” para que cada ciudadano tenga control sobre su información bancaria y pueda decidir con quién compartirla. Se permitirá autorizar el acceso con un clic, sin necesidad de acudir al banco, y el BCRA establecerá parámetros de seguridad.
Finalmente, se destacó la necesidad de remonetizar la economía en pesos y dólares, corregir la falta de liquidez en los bancos, y sostener una macroeconomía ordenada para evitar volver al déficit financiado con emisión.



