El pronóstico climático trimestral elaborado por el IRI-Universidad de Columbia prevé que, para el trimestre que va de febrero a abril de 2024, las lluvias serán levemente inferiores a las normales en el oeste y centro-este de Argentina. Esto significa que, en promedio, se espera que las precipitaciones sean de 10 a 20% inferiores a las normales.
En el extremo noroeste del NOA y noroeste de la Patagonia, las probabilidades de que las lluvias sean deficitarias (es decir, que estén por debajo del 80% de las normales) son mayores al 60%. Esto significa que, en estas regiones, es probable que se registren sequías.
En el resto del territorio, el pronóstico no tiene herramientas para clasificar como más probable de ocurrir a alguna de las categorías: inferior, normal o superior. Por ello, se clasifica como climatología, lo que significa que es probable que las lluvias se mantengan dentro del rango normal.
En cuanto a las temperaturas medias, se esperan temperaturas más cálidas con mayor probabilidad de ocurrencia sobre el NOA, NEA, Cuyo y Patagonia. En la región Pampeana, se prevén valores dados por la climatología local.
Esta perspectiva será complementada con la información provista por el pronóstico climático por consenso que elabora el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) en los próximos informes.
